Ron para dos

Cae el sol y repite "No sé quien soy"

Esconde llaves que te llevan a cofres enterrados bajo

la purpurina de un corazón ya muerto en el que guardaba

todos sus secretos.

Y quien sabrá si será su ilusión, o fue una verdadera relación.

Siempre quiso ser un misterio, lo logró; me entretengo descifrando

los códigos de sus labios y los trazos de su espalda ancha,

Me salpica de su libertad, me llena con versos de verdad.

Los corazones rotos tienden a amar mas.

No califico esto como una historia.

Lo defino como una breve descripción de el.

"Apaga la luces; a oscuras uno no ve los defectos del corazón."

Tendrá mas de mil versos guardados en una botella de cristal.

La tiro al mar cuando los latidos fueron el eco de un marcapasos oxidado.

Enfrentó y venció a la Reina de la Lluvia.

Luchó contra su realidad.

Confrontó la muerte con sus propios ojos.

Se la sigue bancando.

Y lo peor. No se que es lo que soporta.

Pero se que detrás de esa coraza hay una lágrima que necesita

de las palmas de una mano cálida, una mano de consuelo.

 Su faro en el camino es el silencio.

 Su mejor amigo es el Ron.

¿Que mejor que amanecer junto a el?

Al menos, no le reclama lo fallos que ha cometido.

Sin duda su amistad parece inquebrantable.

Nunca podré descubrir quien realmente es.

Lo observo de lejos y me asombro, quisera estar a su lado.

Quisiera ocupar el lugar del Ron, o del cigarro que lleva entre sus dedos.

Quiero ser la musa de esos versos.

Escucha el tren, ya nos vamos.

Aguanta un poco más que el destino está en nuestras manos.

Otra botella, por favor.

Hablemos del hoy.

Hablemos de nosotros dos

Hablemos de que te quiero aunque esto parezca un cuento.

Solo tengo este relato para vos.

Pero también un corazón.

Un corazón para amar-te.

Esta noche, y por el resto de todas  Ron para dos.