Alas de oro




Me envolviste en un jaula de cristal para que nunca nadie me pueda lastimar.
Me acostumbré tanto al brillo de los barrotes de mi cárcel, que el brillo del sol me asusta.
Escondida detrás del vidriado no siento dolor ante el verdadero mundo, si no que siento dolor de no poder conocer por mi misma lo que los demás están conociendo en este momento.
Siempre dije que no es lo mismo vivirlo en carne propia que escuchar historias, que es de cobardes no animarse a descubrir sus mayores miedos.
Pero me di cuenta que solo soy una habladora, porque me acostumbre al encierro y yo misma le temo a enfrentar a mi mayor miedo, al futuro detrás del barrote.
Cuando le abris la puerta de la jaula al pájaro al que le cortaste las alas para que sea tu mascota, no va a ser totalmente libre, no va a volar, se va a quedar en la jaula porque si avanza se cae.

Comentarios

  1. Hola...me encantó...
    Me encanta como escribes chica...

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  2. Hola...me encantó...
    Me encanta como escribes chica...

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